Al día
siguiente llevamos la experiencia al mundo adulto. Quisimos conocer las
opiniones de otras personas que, posiblemente, también trabajarán con niños y
con gente con multitud de problemas: los alumnos del TASOC (Ciclo Formativo de
Grado Superior de Animación Sociocultural).
Comenzamos
la exposición de la misma manera que lo hicimos con los niños. Para ello
previamente les pedimos que se pusieran en la piel de niños de entre once y
doce años. Lo hicieron muy bien. Nos sentimos muy apoyadas desde el primer
momento. A continuación, igual que en el colegio, mostramos el cortometraje.
Después, tuvo lugar un debate en el que todos intercambiamos opiniones y puntos
de vista. Nos resultó muy enriquecedora la opinión de Santi, el profesor del
grupo quien, al igual que nosotras, está convencido de que los colegios
necesitan intervenciones como esta, proyectos que eduquen a los niños para
enfrentarse a una vida en la que la realidad es mucho más dura que la que se
les muestra en los cuentos de hadas.
En
esta entrada quisiera dar las gracias a todos los que participaron por darnos
esta gran oportunidad y, sobretodo, a aquella persona que, aún sufriendo por
sus recuerdos, tuvo el gran valor de permanecer contemplando lo que nosotras
queríamos mostrarle y por animarnos a seguir adelante.
Un
abrazo enorme para el TASOC de trinitarias
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario